Me estoy aconstumbrando a ti.
Suena grande, ¿verdad?
Me estoy aconstumbrando a tu sonrisa, capaz de arrasar con todo.
Me estoy aconstumbrando a tu mirada, tu mirada que tiene el mismo brillo que tienen las estrellas y que bonita es.
Me rompes todos los esquemas con tan solo mirarme o sonreirme.
Tú que traes contigo la primavera entera y el verano a continuación.
No somos "nada" y a la misma vez
lo eres "todo" para mi.
Sé que te voy a ver, y la lengua me tiembla, mis labios dudan y mi voz no sé si saldrá tal y como quiero y menos aún las palabras. Haces que hasta la última de mis terminaciones nerviosas cobre vida propia.
Y quiero que siempre tengas la duda de con que te sorprenderé a la vuelta de la esquina.
Y aprovecho para decirte todo lo que aún no te he dicho, todo lo que no me atrevo a contarte ni con los ojos cerrados, ni tu dormido.
Tengo el vicio de hacer todo de golpe, de que me da igual lo que pase después.
Y ahora la adrenalina me consume porque me he dado cuenta de que lo intentaría por ti, hasta mil veces si hicese falta.
Te pediría unos segundos de tu vida, y hasta incluso te afirmaría lo evidente.
Que te quiero sin pensar en lo que vendrá después.
Te quiero en silencio porque no quiero que se note demasiado.
Tengo miedo a tenerte y después perderte sin mas.
Estoy capturando nuestra historia a base de fotos, para guardarla en lo mas dentro de mi. Por si decides salir por la puerta.
Quiero ser solo tuya todo el tiempo que se pueda, toda la vida.
Y sobre todo dime que por mucho que pase el tiempo, seré algo en tu vida.
Me estoy aconstumbrando a ti, o mejor dicho, me he aconstumbrado a ti.